Pedro Martín de Campos

Siglo: XVIII Fecha: 07/06/1798

PEDRO MARTIN DE CAMPOS nació en Mota del Cuervo en el siglo XVIII, fue un erudito conocedor de las prácticas botánicas más convenientes para la mejora de cosechas de cereales de aquella época. El 7 de junio de 1798 contribuyó con sus aportaciones botánicas a la edición colectiva de un “SEMANARIO DE AGRICULTURA Y ARTES DIRIGIDO A LOS PÁRROCOS”, a través de los cuales se pretendía instruir a los agricultores de todo el reino. Entre otras buenas prácticas, este moteño, les mostraba las ventajas de la SIEMBRA DE TRIGO MATEADO. Estas aportaciones fueron recogidas en el libro publicado por el Real Jardín Botánico de Madrid en 1798 -Vol. Nº 3 (1). A continuación se recoge una parte literal de sus escritos.- “Por tanto he creído que se debe publicar y hacer notorio a todos los labradores del reyno el método que observé en la provincia de Extremadura en la sementera del año calamitoso de 1780. Viéndose aquellos en el mismo estado de necesidad que lo están casi todos al presente, recurrieron al medio (que sin duda habrían oído a sus mayores) de sembrar los trigos mateados: y yo que advertí en algunas tierras esta novedad, procuré informarme y anoté el modo con que lo habían practicado por lo que en adelante se pudiese ofrecer y porque no me desagradó este género de sementera. Trigo mateado se entiende el que se siembra por el propio método que los garbanzos, las muelas, lentejas y otras legumbres: redúcese a que va un hombre detrás del arado con una cesta o esportillo en una mano, y con la otra dexa caer en cada paso quatro o seis granos juntos en lo hondo del surco: vuelve el arado, lo cubre, y el sembrador hace lo propio en el surco abierto, y se continúa hasta concluir la tierra.”… En resumen, viene a explicar que, con este método de siembra, se consiguen mejores cosechas con menor necesidad de grano en la siembra. Los granos así sembrados nacen todos y no acaban en el estómago de las aves (2) o de los insectos, además de resistir mejor la sequía y el azote de los vientos a la planta. En sus escritos alude también al refranero popular de la época, cuando dice: “peonada de zacho, fanega de trigo”. Se refiere a que cuantas más veces se escarde (se zache) la tierra más producción de trigo se obtendrá…


(1) “SEMANARIO DE AGRICULTURA Y ARTES DIRIGIDO A LOS PÁRROCOS” Real Jardín Botánico, Edición de 1798.


(2) Aseguraba que había calculado el número de granos que llevaba en el buche una paloma, y que lo había multiplicado por el promedio de palomas que había en los palomares de la Mota del Cuervo, y que ese trigo ascendía a más de 2.200 fanegas. A continuación se recoge una copia de la portada del libro y una copia de la parte del texto donde Pedro Martín de Campos , cita que él, es natural de la Mota del Cuervo.

Fuente: Fondos Documentales