D. Santiago Plaza es el propietario de uno de los hostales, paradores o posadas con más solera de los que se puedan contar en la Mancha Santiaguista.
Hombre afable y conocedor de su profesión es el heredero de tantos posaderos que le han precedido desde tiempos inmemoriales, en el mismo lugar donde hoy se encuentra su hostal, desde donde cuidaron a viajeros de diligencias, tratantes, caminantes y turistas que recorrían el Camino de los Valencianos hacia Levante, camino que quizás recorrió y, ¿por qué no?, bien se pudo alojar en esa posada, un Cervantes maltrecho que venía de su cautiverio en Argel, desde el puerto de Denia hasta la Corte de Madrid, sí es claro que tomó ese camino y tuvo que pasar por La Mota.
Este hostal ocupa y ha ocupado un lugar en el Camino de los Valencianos, después Camino Real, en la villa de La Mota, y para su confirmación esta transcripción de un manuscrito de procesos a moriscos, fechado en el año de 1585.
“… y Ginés Março que por otro nonbre se llama Ginés Aregua, y que es traginero y trabajador, que vive en la calle de la Arena, cerca del Parador del Provençio, vecinos de La Mota el Cuerbo y naturales de Portilla …”
El párrafo habla de los moriscos del reino de Granada, Alonso Pardo y Ginés Marzo, que fueron deportados a la villa de La Mota después de la guerra de la Alpujarra y fueron alistados allí por primera vez.
Ambos eran naturales de Portilla, una villa a dos tiros de arcabuz de Las Cuevas, la actual ciudad Cuevas de Almanzora en la provincia de Almería, estando Portilla, hoy día, incluida en este municipio.
Alonso Pardo fue un famoso y rico morisco de La Mota que tenía su tienda y vivienda en la Plaza del Toril, en la actual Plaza de Cervantes.
Ginés Marzo era trajinero o trajinante, es decir, la persona que va por los pueblos llevando y acarreando género. Vivía en la calle de la Arena, la actual calle Isabel I de Castilla, muy cerca del parador o posada, la que con el tiempo pertenecería al Sr. Plaza.